Devolución caliente
La vergonzosa marcha y contramarcha de la Sunat en el caso de la administración de Panamericana Televisión fue tan efímera que dejó descolocados a muchos –incluyendo a mi anterior nota–, y sobre todo a los medios de prensa que habían comenzado una campaña en contra de un atropello a la libertad de prensa y un ejemplo de democradura.
Es un respiro de alivio que se haya dejado de lado esta toma y se haya en puesto en manos de una institución menos polémica como Indecopi (eso esperamos todos). Pero también hay que resaltar lo bien que puede funcionar la presión ejercida por los medios, algunos líderes que alcen la voz cuando deben hacerlo y, por supuesto, mediante el clamor de la opinión pública.
Aún así, el caso sigue teniendo muchas aristas: una de ellas es, obviamente, el futuro administrador. ¿A quién devolver Panamericana ahora? Como se dijo antes, el regreso del clan Schütz es otro gran desastre y la vuelta a un gran lacra antidemocrática. Esto se sabría recién dentro de algunos meses. Otro punto que se debe develar es quién fue la mente maestra detrás de la ominosa intervención.
Y un tercer factor que parece haber sido relegado por el escándalo es la situación de los trabajadores. La mayoría de ellos sin culpa alguna del catastrófico manejo del canal. El tema dará para más. Aquí lo dejaremos, por ahora.
P.D.: Esta nota se retrasó, en parte, a los problemas con los blogs de lamula.pe. Ojalá no haya otro rollo de intervenciones detrás. En fin, vuelta a la página y felicitaciones por el lanzamiento del miércoles.